Poco a poco los días se van alargando y cada vez hay más horas de sol. La primavera está llegando, intercalando días de frío y lluvia con otros de sol y subida de temperaturas. Con la llegada del buen tiempo pueden surgir diferentes trastornos físicos y psicológicos asociados a los cambios estacionales. ¿Cómo afecta el cambio estacional a las personas que tienen alguna enfermedad mental? ¿Qué pautas podemos seguir para encarar esta estación de la mejor manera?
La astenia primaveral puede ser uno de estos trastornos pasajeros que puede llevar asociados síntomas de irritabilidad, cansancio, dificultades para conciliar el sueño, etc. Normalmente es la respuesta de nuestro organismo a los cambios, y en unas pocas semanas estos síntomas suelen desaparecer; es una reacción que podemos considerar leve.

Sin embargo, para algunas personas se pueden agudizar síntomas como la sensación de soledad y pequeños episodios depresivos, siendo recomendable el tratamiento con un/a profesional.

También en primavera se agudizan las alergias (asociadas principalmente a gramíneas, la flor del olivo, las cupresáceas o al plátano de sombra), que pueden ser un auténtico problema y que precisan de tratamiento médico. Las personas que sufren algún trastorno mental son más sensibles a estos cambios, y es por ello que el cambio de estación es un momento que les puede generar más desequilibrios o alteraciones psicológicas.

Como pautas a seguir para minimizar estos síntomas, lo aconsejable es:

  • Llevar un estilo de vida lo más saludable posible, con actividades que incidan en cuidar nuestro cuerpo y mente.
  • Asimismo, practicar alguna actividad física o pasear durante el día puede mejorar nuestro estado físico y emocional ampliamente.
  • También es recomendable intentar mantener el equilibrio, cuidando las horas de sueño y la alimentación.
  • Apoyarse en una red social (familia, amigos…) que fortalezca los lazos con el grupo de pertenencia y evite el aislamiento, es otra de las pautas que más bienestar puede ofrecer.

Y ante cualquier duda, o si vemos que los síntomas negativos se alargan en el tiempo, recomendamos acudir siempre a la ayuda profesional.

Terapia

¿En que podemos ayudarte?

El Instituto Carl Rogers cuenta con un equipo de psicólogos y psicólogas que ofrecen una intervención integral y atienden a cada persona en sus diferentes necesidades.

El tratamiento está dirigido a personas de cualquier edad, desde niños hasta adultos mayores, y a familias o parejas, que están atravesando momentos de dificultad y sufrimiento o que tienen la inquietud de crecer o mejorar en algún aspecto de su vida.